Me asombro a mí mismo del cambio tan bueno que ha dado mi vida en estos últimos meses. Todo me va en apariencia bastante bien y sin sobresaltos o contratiempos (excepto que no me llega la beta de Pottermore ).
Sin embargo, anoche, mientras daba vueltas en la cama porque no me quedaba dormido, tuve un gesto involuntario que me dio en qué pensar:
Desde siempre he dormido con la espalda pegada a la pared, pues era una postura con la que me sentía como más seguro, una postura con la que apenas ocupaba espacio en la cama, casi como queriendo aparentar que ni estaba ahí…cabe resaltar que era mi época mala. Pero durante todo este verano, dormía en el borde opuesto de la cama, y estirándome de forma que ocupaba casi toda la cama con las piernas, me sentía más seguro de mí mismo y todo eso.
Mas anoche, volví a pegarme a la pared involuntariamente, y no quería separarme de ella, volver a dormir así. ¿Querrá decirme mi cuerpo que añora mi vida anterior? ¿Que quiere volver a la inseguridad y a todos esos problemas depresivos?
Pese a esta paranoia, yo me encuentro perfectamente, risueño como hasta ahora, e incluso estoy cantando Teenage Dream y Last Friday Night, de Katy Perry. Nada de lloriqueos e ir dando pena por ahí. Si lo de la pared se repite esta noche, me dará en qué pensar.
¿Qué opináis vosotros?
Let’s go away and don’t ever look back.
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